«La capital de Lanzarote»

Desde 1852, Arrecife es la capital de Lanzarote y su principal puerto y centro comercial. No posee grandes atracciones turísticas que visitar. Aún así merece la pena dedicarle aunque sea unas horas al núcleo urbano más importante de la isla.

¿Qué ver en Arrecife?

Entre las visitas más recomendables están las dos fortalezas que posee la ciudad, los Castillos de San Gabriel y San José.

El primero está situado en un islote al que se llega a través de un largo puente levadizo. Es el llamado «Puente de las Bolas». Ir al atardecer por ejemplo es una buena opción.

El Castillo de San José fue restaurado por César Manrique. Desde 1979 alberga el Museo Internacional de Arte Contemporáneo. Desde él se contempla una vista interesante de la zona portuaria.

Continuando por el paseo marítimo merece también la pena visitar la parte de San Ginés. En ella se encuentra la iglesia con este nombre y el llamado «Charco de San Ginés». Es una zona compuesta por bonitas cabañas de pescadores junto a un pequeño lago que conecta con el mar.

Por último, si os apetece descansar en vuestra visita a la capital de la isla, podéis visitar la playa El Reducto. Es la playa de referencia de Arrecife. Se trata de una Bahía que nace en la Punta del Camello y termina en el Gran Hotel de Arrecife. Está protegida por arrecifes naturales que hacen de ella una playa sin apenas oleaje, asemejándose a una gran piscina natural.

Se encuentra colindante a un paseo marítimo con una gran oferta de ocio y comercio. En esta zona hay bares, restaurantes, tiendas y servicios propios de una ciudad capitalina así como actividades lúdicas para todas las edades. Además, cuenta en su entorno con un parque temático con juegos infantiles para los más pequeños.