Cine y Literatura en Grecia

Contenido

5/5 - (1 voto)

El cine y la literatura en Grecia son dos de las artes más identificativas de este país. En el caso del primero, el cine griego nos ha dejado grandes títulos, con reconocimiento internacional. Con respecto a la literatura, la literatura griega es uno de los pilares fundamentales de la literatura clásica.

A continuación os comentamos un poco sobre el cine y la literatura en Grecia.

El cine griego

Si hablamos del cine y la literatura en Grecia, comenzando con el primero, podemos decir que el cine griego tiene una larga y rica historia. Aunque limitada a veces por la guerra, la inestabilidad política y un gobierno griego hostil, la industria del cine griego domina el mercado interno y ha experimentado el éxito internacional.

Dos de los directores griegos más famosos internacionalmente en el siglo XX fueron Konstantinos Gavras (más conocido con Costa-Gavras, 1933) y Theo Angelopoulos (1935-2012). En la actualidad también destacan Yorgo Lanthimos (1973) y Athina Rachel Tsangari (1966).

El cine griego nos ha dejado muy buenas cintas en los últimos años. Algunas de las mejores películas de la cinematografía del país son las siguientes.

“Desaparecido” (Costa-Gavras, 1982)

Película americana dirigida por Costa-Gavras. Ganadora en el festival de cine de Cannes, retrata la desaparición de un periodista americano en Chile, en la época del golpe de estado de Pinochet. Tuvo gran reconocimiento de crítica y público.

Cartel de la película “Missing”

“La eternidad y un día” (Theo Angelopoulos, 1998)

Podríamos haber elegido cualquier otra obra de Angelopoulos, sin duda el cineasta más importante de la historia del cine griego y uno de los maestros del cine europeo. Quizás “La eternidad y un día”, ganadora de la Palma de Oro en Cannes, sea la que goza de un mayor prestigio crítico y la que más espectadores han visto. Narra la relación entre un poeta moribundo y un niño albanés exiliado.

Cartel de la película “La eternidad y un día”

“Z” (Costa-Gavras, 1969)

Aunque de producción franco-argelina, no podemos olvidar en esta lista la mejor película de Costa-Gavras. “Z” es además una película profundamente helena, una mirada ácida y no exenta de un peculiar sentido del humor de los tiempos de la Dictadura de Papadopoulos que revela algunos de los grandes males de la política griega vigentes en la actualidad. Adapta la novela homónima de Vassilis Vassilikos y ganó el Oscar a la Mejor Película de Habla no Inglesa, aunque representando a Argelia.

Cartel de la película “Z”

“Canino” (Yorgos Lanthimos, 2009)

La película que retornó a Grecia al mapa del cine de autor contemporáneo es un enfermizo y surrealista retrato de una familia aislada del mundo exterior que se rige por sus propias y poco ortodoxas reglas. Premiado en Cannes, y nominado a un Oscar, el tercer largo de Lanthimos evidencia que algo ya andaba mal, muy mal, en el imaginario griego allá por 2009.

Cartel de la película “Canino”

“Nunca es domingo” (Jules Dassin, 1960)

La obra de mayor éxito de Jules Dassin, estadounidense exiliado en Europa tras la Caza de Brujas de Joseph McCarthy, es también una de las mejores películas sobre la prostitución que se han rodado nunca. Melina Mercouri, que posteriormente se convertiría en esposa de Dassin, encarna a Ilya, la reina de las prostitutas en el Pireo. El film, griego-estadounidense, estuvo nominado a 5 Oscar, entre ellos el de Mejor Película.

Cartel de la película “Nunca es domingo”

“Stella” (Mihalis Kakogiannis, 1955)

Globo de Oro a la Mejor Película Extranjera, esta adaptación de la ópera homónima de Iakovos Kabanellis es uno de los grandes hitos del cine feminista. En su debut en la gran pantalla, Melina Mercouri interpreta a una joven rebelde que disfruta de su vida y de los hombres hasta que se enamora de un famoso futbolista. Aún así, y en un movimiento poco usual en las narraciones de mediados del siglo XX, se resiste a sacrificar por amor su libertad. Causó un gran impacto en su estreno y resiste como el primer día al paso del tiempo.

Cartel de la película “Stella”

“Boy Eating the Bird’s Food” (Ektoras Lygizos, 2012)

El mejor retrato posible de la miserable situación que viven los griegos desde el inicio de la crisis. Premiada en el Festival de Sevilla, la película está monopolizada por un talentoso y joven cantante de ópera que sobrevive en un país obligado a despreciar su don, robándole el pienso a su canario para llevarse algo a la boca. Durísima en su planteamiento, es probablemente la película más terrorífica, por real, del cine griego.

Cartel de la película “Boy Eating the Bird’s Food”

“Attenberg” (Athina Rachel Tsangari, 2010)

Junto a Lanthimos, Athina Rachel Tsangari es una de las principales exponentes de la Nueva Ola del cine griego. Su ópera prima, “Attenberg”, premiada en Venecia y en el BAFICI de Buenos Aires, sigue la senda surrealista y marciana de ‘Canino’, llevando incluso un paso más allá las extravagancias de su antecesora. Varios años después, sigue inédita en nuestro país.

Athina Rachel Tsangari

“Miss Violence” (Alexandros Avranas, 2013)

Premiado en el Festival de Venecia, pero inédito en nuestro país, el segundo largometraje de Alexandros Avranas es quizás el punto culminante de las intenciones y anhelos de la Nueva Ola del cine griego. Extraña, perturbadora y durísima, arranca con el inexplicable suicidio de una niña, hija de una familia aparentemente modélica, que se lanza por la ventana con una sonrisa en la boca el día de su undécimo aniversario.

Escena de la película “Miss Violence”

“El ogro de Atenas” (Nikos Koundouros, 1956)

La primera película de cine negro griega está considerada como el ‘Ciudadano Kane’ de la cinematografía helena. Combina lo mejor del neorrealismo italiano y del uso de la luz del expresionismo alemán, y cuenta con un protagonista, Dinos Iliopoulos, en auténtico estado de gracia. El actor interpreta a un gris empleado de banca cuya vida da un vuelco cuando es confundido con un peligroso delincuente.

Escena de la película “El ogro de Atenas”

“Zorba, el griego” (Michael Cacoyannis, 1964)

La historia de esta cinta relata el conflicto existente entre los dos personajes principales, Zorba y Basil, quienes representan el conflicto humano entre la pasión y la razón, buscando representar el dualismo cognitivo propio de la humanidad.

La película fue nominada a siete Premios de la Academia, obteniendo tres galardones. El baile del protagonista se ha convertido en un icono popular griego tras el estreno del filme.

Famosa escena del baile en la película “Zorba el griego”

“Un toque de canela” (Tassos Boulmetis, 2003)

Pequeño gran éxito comercial del cine griego, esta dramedia culinaria, en la mejor tradición gastronómica de “El festín de Babette” (G. Axel, 1987) o “Como agua para chocolate” (A. Arau, 1992) es un canto de amor a la familia, las tradiciones y la comida. Representó a su país aquel año en la carrera por el Oscar a la Mejor Película de Habla No Inglesa.

Cartel de la película “Un toque de canela”

La literatura griega

Continuando con el cine y la literatura en Grecia, siguiendo con la segunda, podemos decir que Grecia ha sido, junto al pueblo hebreo, la cuna de la civilización occidental ya que su política, arte, pensamiento y literatura han sido los más influyentes en occidente. Las manifestaciones culturales del pueblo griego se caracterizan por un gran sentido de la mesura y el equilibrio. De ahí su gusto por la sencillez, la claridad y la proporción. Su arte y literatura son fáciles de comprender y admirar, ya que no tienen exageraciones o el lujo propio de las literaturas orientales.

La fuente principal de inspiración de los griegos es su mitología: las creencias y leyendas religiosas. Los dioses griegos no representaban la perfección absoluta, sino que eran humanos. Están próximos a nosotros porque tienen nuestras debilidades y vicios, pero sobre todo, nuestras virtudes, que es lo que nos hace tan atractivos. No hubiese sido posible una literatura tan perfecta sin una lengua rica y desarrollada, adaptable a la prosa y al verso, a la expresión de ideas y sentimientos, y el idioma griego lo fue, gracias a su abundante vocabulario, la flexibilidad de su sintaxis y a su entonación casi musical.

Los griegos destacaron sobre todo en los géneros literarios: la poesía épica, la poesía lírica y el teatro, aunque también cultivaron la filosofía, la historia y la oratoria. Dentro de la epopeya, podemos destacar como protagonista fundamental a Homero, autor por excelencia de este género, al cual se le atribuye la autoría de las dos grandes epopeyas griegas: la Ilíada y la Odisea.

Escultura de Homero

La literatura griega contemporánea

En este apartado de cine y literatura en Grecia, podemos decir que, en cuanto a literatura contemporánea, en el siglo XIX, con la independencia de Grecia, se produce un renacimiento de su literatura. Destacamos las siguientes obras de la literatura griega contemporánea:

  • “La Asesina” (Alexandros Papadiamantis)
  • “Lirio y serpiente” (Nikos Kazantzakis)
  • “Agamenón” (Yannis Ritsos)
  • “Offshore” (Petros Márkaris)
  • “Otra vida por vivir” (Theodor Kallifatides)
  • “Loxandra” (María Iordanidu)
  • “Qué queda de la noche” (Ersi Sotiropoulos)
  • “La inmortalidad de los perros” (Costas Mavrudis)
  • “Casandra y el lobo” (Margarita Karapanou)
  • “La muerte de Ulises” (Petros Márkaris)
  • “Zorba el griego” (Nikos Kazantzakis)
  • “Los días de Alejandría” (Dimitris Stefanakis)
  • “Hasta aquí hemos llegado” (Petros Márkaris)
Marcar el enlace permanente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *